Hierro* con un bajo contenido de carbono* (menos de 0,02 %) y libre de impurezas ya que en el proceso de forjado se elimina también la mayor parte de la escoria. Es maleable, relativamente blando y de estructura fibrosa que se trabaja y suelda fácilmente. El hierro dulce o "hierro forjado" es el único hierro que se ha empleado en Occidente hasta la Edad Media, cuando comenzó la difusión del hierro de fundición*. Se ha empleado en varios trabajos artesanales de forja, así como en la construcción. En la actualidad, el uso de hierro forjado se limita a usos decorativos.