Herramienta azteca en forma de T, también llamada hacha* o hachuela, elaborada con una fina lámina de cobre*. En las crónicas españolas del siglo XVI, en México, existen referencias al empleo de hachas en los intercambios, por lo que algunos autores piensan que estas piezas, demasiado finas para tener utilidad práctica, pudieron ser una forma de dinero (1)*. Sin embargo, esta opinión es discutida por quienes les atribuyen únicamente un uso artesanal, como herramienta de trabajo de los talabarteros o como un instrumento de alfarero destinado a moldear la arcilla.