Esencia vegetal* que se obtiene por la destilación de la trementina* (en su estado más puro) o de la madera* resinosa de los pinos. La esencia de trementina se conocía desde la Antigüedad y se empleaba con fines medicinales y como disolvente*. A partir del siglo XV se convirtió en uno de los principales disolventes para preparar los barnices* y los medios de la pintura al óleo. Es un líquido incoloro, fluido y de olor penetrante. Al contacto con el aire y la luz amarillea y después de su evaporación deja una pequeña cantidad de residuo resinoso. Disuelve los elastómeros, las ceras*, las grasas* y la mayor parte de las resinas naturales.