En la Edad Media este pigmento se conocía como "aurum musivum", es decir, "oro de mosáicos" u "oro musivo".
Es un bisulfuro de estaño* empleado frecuentemente en la Edad Media y posteriormente como sustituto del oro* en la miniatura de los manuscritos, en la fabricación de fondos dorados de mosaicos y en la pintura al óleo. También se llamaban con este nombre todo tipo de polvos muy finos de ciertos metales o aleaciones (cromo*, aluminio*, estaño*, latón*, bronce*) que, mezclados con un barniz* o adhesivo*, se empleaba en las técnicas artísticas para realizar imitaciones de dorados. Hoy en día, también se denominan así varios colorantes* orgánicos sintéticos en forma líquida, sólida o en pasta.