A parte de su uso en carpintería y ebanistería, el ensamblaje a media madera se ha empleado en la fabricación de tablas como soporte pictórico (en España de manera esporádica entre los siglos XV y XVI), aunque no se recurría a él con más frecuencia por ser un método poco resistente ya que, al tener demasiada superficie encolada, se despegaba con el tiempo.
Técnica de ensamblaje* en el que los dos elementos a unir se rebajan en la mitad de su grosor en la zona de encuentro, de manera que, cuando se apoya el uno en el otro sus superficies quedan enrasadas.