Los términos opus latericium y opus testaceum se han empleado como sinónimos, aunque algunos autores consideran que el opus latericium debería reservarse para la fábrica de adobes.
Técnica de edificación de la arquitectura romana en la que el espacio entre dos paramentos de ladrillo o de adobe se llenaba con opus caementicium* por tongada. Ha sido la técnica de construcción más empleada desde la época de Augusto y a lo largo del todo el Imperio. Inicialmente, se emplearon fragmentos de cerámica y de tejas aunque pronto fueron sustituidos por ladrillos del tipo semilater, de forma triangular, con su base vista y con la punta colocada hacia dentro para favorecer el agarre con el opus caementicium y economizar ladrillos. Más tarde, en época del emperador Septimio Severo (193-211) se usaban los ladrillos de tipo bipedalis (60 x 60 cm.) y sesquipedalis (45 x 45 cm.), rotos de forma irregular por una, dos o tres caras, para favorecer el agarre con el opus caementicium. En muchos casos el opus latericium se revestía con un mortero.