Procedimiento de la preparación de las tablas como soporte pictórico. Después del encolado* de la tabla, se procedía a la eliminación de los nudos y al arreglo de las grietas y de las juntas de la madera, para recibir después el aparejado*. Esta operación consistía en rellenar los
huecos con fibras vegetales o lienzo encolado y yeso. A continuación, se utilizaba una tela de lino o cáñamo (estopa) encolada para cubrir, en el reverso, solamente la zona de las grietas y de los nudos, mientras que por el lado de la pintura se solía cubrir con esta tela toda la superficie. Con esta medida se trataba de prevenir, atenuar o evitar el avance de las grietas por la cara de la pintura y servir de medio de cohesión de las capas de aparejo y pintura contra los movimientos de la madera.